La conservación en tierras privadas constituye una actividad en auge y que complementa el trabajo realizado por las entidades públicas. A partir del decreto 1996 del año 1999, el gobierno colombiano reconoce los esfuerzos de la iniciativa privada en pro de la conservación de los ecosistemas, y para ello crea la figura de Reserva Natural de la Sociedad Civil (RNSC) como la parte o un todo de un inmueble privado que conserve una muestra de un ecosistema natural y sea manejado bajo los principios de sustentabilidad en el uso de los recursos naturales. El registro de una RNSC es un proceso voluntario, que se realiza a solicitud del propietario ante Parques Naturales Nacionales de Colombia.
La Fundación Palmarito impulsa esta iniciativa, que cobra especial relevancia en ecosistemas como los de sabana inundable, presentes en las tierras bajas de Casanare y Arauca, ya que presentan muy baja representatividad dentro del Sistema Nacional de Áreas Protegidas. Además, en esta región se presenta un ejemplo único entre conservación y desarrollo, ya que la ganadería extensiva, combinada con el ecoturismo, permite la conservación de estos ecosistemas de una manera más que aceptable.
Desde el momento de su nacimiento, la Fundación Palmarito inicia una campaña para difundir las bondades de esta figura entre vecinos y otros propietarios de predios en la región de Los Llanos. Entre otros aspectos, las RNSC permiten una defensa efectiva de la integridad de los predios ante las actividades de exploración y perforación petroleras, tan comunes en la región de Los Llanos y el ejemplo de Palmarito convenció a varios propietarios a registrar sus predios en Casanare como RNSC. El resultado de estas gestiones permitió que se registraran otros tres predios de indudable valor ecológico y donde habitan, entre otros, jaguares (Panthera onca), pumas (Puma concolor) y nutrias gigantes (Pteronura brasiliensis). El área protegida ascendió a más de 34.000 hectáreas de bosques y sabanas naturales dentro del ecosistema de sabana inundable, cuya importancia es aún mayor si se tiene en cuenta este ecosistema tiene baja representación dentro del Sistema Nacional de Parques Nacionales.
En 2012 la Fundación Palmarito apoyó la creación de la RNSC Santana, ubicada en Casanare, y de una extensión de unas 17.000 hectáreas. En ese mismo año la Fundación Palmarito se registró ante Parque Nacionales como Organización Articuladora de Reservan Naturales de la Sociedad Civil. Este registro permite a Palmarito actuar en nombre de otras RNSC, ayudar a los propietarios a registrar sus predios como RNSC y a establecer redes que integren a las RNSC. De este modo la Fundación Palmarito ha constituido la Red de Reservas Privadas de la Orinoquia, donde se integran aquellas reservas sobre las que Palmarito ha tenido alguna incidencia.
Durante los años 2013 y 2014 la Fundación Palmarito ejecutó un proyecto auspiciado por el Fondo Acción para el registro de otras 10 RNSC, seis en Vichada y cuatro en Casanare, que en total encierran algo más de 8673 hectáreas de sabana inundable (Casanare) y Altillanura (Vichada). Para cada una de estas 10 reservas se realizó una caracterización biológica, que ha permitido conocer parte de la biodiversidad que albergan y el plan de manejo que orienta las acciones tendientes a garantizar la conservación de la estructura y funcionalidad de los ecosistemas que se protegen. Las reservas quedaron inscritas ante Parques Nacionales a finales de 2014 y son las siguientes: Rancho Paravare, La Reforma, Corocito y Los Musos en Casanare y Santana, Cachicamo, El Gavilán, La Campana, El Pañuelo y La Ventana en Vichada. En 2016 se registra Casambá, de 196 has y propiedad de la Fundación Palmarito.
En 2017 y con el apoyo del Fondo Acción, la Fundación Palmarito inició el proceso de inscripción de cuatros nuevas RNSC ante Parques Nacionales (Miramar y La Fortuna en Hato Corozal, Hato Las Cobijas en Paz de Ariporo y LA Fortuna en Yopal, todas ellas en Casanare y que suman 1336 has. Además se sumaron a la Red de Áreas Protegidas Privadas de Palmarito (RAPP) las RNSC El Milagro en Paz de Ariporo, Los Gavanes en Trinidad y Mesetas de Versellas en Támara que abarcan 1319 has.
En 2018 se registraron las primeras RNSC en el municipio de Maní (Casanare): Corozito (1213,2 has) y La Palma (35,3 has) y se iniciaron los trámites de registro para reservas en el departamento de El Meta, Los Arreboles (21,1 has) y El Caujaro (63 has). Ese mismo año, y bajo el auspicio del proyecto Tropical Forest Conservation Aliance (TFCA) se inició el proceso de registro de otras dos reservas a orillas del río Cravo Sur (Casanare), Corocora (421,6) has y El Boral (9.349,1 has).
En 2019 se va iniciar un proyecto con WWF par el registro de otras 6.836 has de conservación privada en los municipios de San Luis de Palenque, Paz de Ariporo y Hato Corozal (Casanare) y La Primavera (Vichada)
En resumen la Fundación Palmarito ha promovido o está promoviendo en apenas 12 años el registro ante Parques Nacionales de unas 82.003 hectáreas como RNSC, lo que contribuye de manera clara a fomentar esta figura de conservación.
En muchas de estas reservas se elaboran, además, los planes de manejo de las mismas. En este sentido, hemos contribuido a la elaboración de la Guía para la planificación de las áreas bajo protección privada de la Orinoquia, junto con el resto de las organizaciones articuladoras de la región.
Estos resultados reafirman nuestro convencimiento de la importancia de la sociedad civil en la conservación de nuestros ecosistemas y estamos decididos a continuar con esta tarea que beneficia no solo a los propietarios privados, sino a toda Colombia.